Los Préludes de Claude Debussy son dos conjuntos de piezas para piano solo, escritas en 1910-10 y 1912-13, y publicadas como Libro I y II respectivamente. A diferencia de otras colecciones de preludios de grandes compositores, la de Debussy no sigue un patrón estricto de armadura: no hay pruebas de que Debussy necesariamente pretendiera que los preludios se interpretaran como un ciclo, aunque los intérpretes a menudo lo hacen. Los títulos de los preludios están escritos al final de cada obra, lo que permite al intérprete experimentar cada mundo sonoro individual con oídos nuevos, sin dejarse influenciar previamente por los títulos de Debussy. Se dice que Debussy se inspiró para escribir esta pieza en una tarjeta postal que le envió Manuel de Falla. La vista del monumento y el sutil juego de luces y sombras se reflejan en un discurso atmosférico y guitarrero.
