El Capriccio italiano, op. 45 es una fantasía para orquesta compuesta entre enero y mayo de 1880 por Pyotr Ilyich Tchaikovsky.
El Capriccio se inspiró en un viaje que Tchaikovsky hizo a Roma, durante el cual vio el Carnaval en pleno apogeo, y recuerda a la música folclórica italiana y las canciones callejeras. Como estos elementos se tratan con bastante libertad, inicialmente pretendía que esta pieza se llamara Fantasía italiana [cita requerida]. Tchaikovsky incluso utiliza como introducción un toque de corneta que escuchó desde su hotel interpretado por un regimiento de caballería italiano. Otra fuente de inspiración para esta pieza son las Piezas españolas de Mikhail Glinka.
